giovedì, maggio 20, 2004

Es tan fácil romper un corazón

Debo confesar que ahora me dio un poco menos de gusto que hayas dado ese obsequio... (tienes razón, son mejores las sorpresas).

Pero ¿cómo te hago entender que te necesito?
Estoy atrapada por este egoismo del cual no logro despojarme (será porque la mayoría de la gente es así)

Racionalmente sé que no puedo pedirte ni esperar nada... pero, emocionalmente quiero, deseo y espero todo... Este choque brutal entre lo racional y lo emocional es lo que me impide explicarte, y explicarme, el por qué te amo.

Te vas contento y me quedo triste... te vas con esperanza y me quedo desolada...

¿Por qué? Por qué no logro descifrar esta camtidad de contradicciones en mi vida.

mercoledì, maggio 19, 2004

Hay cosas que no me gusta reconocer


Quiero suponer que lo mismo te pasa a ti. Estoy tan confundida y, quiero suponer, que también tú lo estás.
No entiendo por qué me dijiste eso anoche. ¿Qué pretendes que cambie? e inmediatamente después tú explicación "lógica". Tu negación; tu muralla... Te entiendo, exactamente lo mismo hago. Cuando te veo actuar de esa forma te comprendo y todo es claro... ¿Por qué es tan difícil decir la verdad? Pienso que, sencillamente hemos dicho tantas mentiras (en distintas proporciones, por supuesto) que ya no sabemos ditinguir qué tanto de todo ese basurero es cierto.
El futuro está ahí, claro... lo observo, y también tu lo haces... ¿Por qué desperdiciar de esta forma el presente?
Sé que lo piensas y por eso actúas de esa forma... me gustaría actuar del mismo modo yo... pero ... no puedo y me enoja que no me creas.
¿A qué te aferras para no caer?

Iba caminando por la calle, como siempre sin mirar a nadie. De pronto recordé lo que escribiste : "Me dio mucho coraje que te vieran... ¿no fijaste cómo te veían? ... me dieron ganas de reclamarles... ¿Por qué son así?"


Entonces, no pude sino mirar tímidamente a mi alrededor. Los ví observándome, como el hambriento que observa unas gorditas de frijol.

Ahora que lo medito, pienso cuántas personas interesantes han pasado de largo por mi vida, sencillamente porque no me digno a mirarlos. Pero, no puedo hacerlo... sencillamente, no es mi naturaleza.